sábado, agosto 09, 2008

Bubisher_Mohamed Salem Abdelfatah



A veces llega hasta la almohada
Me susurra en su lengua de jeroglíficos

Me despierta.
Abro los ojos y receloso se aleja.

Lo veo detenerse en el umbral de mi silencio
Y escucho nítidamente su canto de sosiego.

Mi corazón empieza a vagar por las costas
Y se remoja los pies descalzos
En las olas atlánticas de la paciencia.