Mostrando entradas con la etiqueta Ali Salem Iselmu. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Ali Salem Iselmu. Mostrar todas las entradas

martes, julio 09, 2024

La guerra de los derrotados_Ali Salem Iselmu

 Tristes días

niños entre los escombros
de un parque de polvo
donde el pan se quema,
la muerte de la vida
el silencio de una maestra
sus pasos entre cadáveres,
nada es sagrado y santo
en la Tierra Prometida
sangre sobre las heridas,
otra muerte.
Es la guerra de los derrotados
los elegidos de Dios
que olvidaron el valle fértil
las aguas del río Jordán
donde un pueblo
escuchó la palabra sagrada
la del prójimo
que no quería la muerte.

jueves, julio 04, 2024

BELGA, NÓMADA DE LAS ESTRELLAS_Ali Salem Iselmu

 

Poema dedicado al erudito y poeta saharaui, Selma Uld Brahim, conocido como (Belga).
Se ha ido Belga
y con él las dunas envueltas de estrellas,
luces de una túnica azul
de un turbante negro
envuelto de canas.
Se ha ido la última palabra de la noche
el primero susurro del amanecer,
se ha ido Belga el erudito de las piedras
de la arena impoluta,
el oteador del agua
de las huellas de un pozo.
Dejaste Tiris y Zemmur,
tristes sin tú palabra,
tus huellas conocen el Sahara
la cumbre de una duna
el valle de árboles desnudos,
el amanecer del silencio.
De ti aprendí la palabra
merhba bikum,
cuando vi una jaima en el horizonte,
una melena de versos
envuelta de arena.
Oh, erudito de la noche
quédate en el silencio
en el oasis de palmeras,
yo prometo encontrar tus huellas
cerca del pozo de arena
cuando conocí tú mirada.

sábado, noviembre 30, 2019

Camina sin miedo_Ali Salem Iselmu


Camina sin miedo,
no te detengas
hacia el este
volverá
a nacer el sol.

El niño sujetará
tú mano
que es su mano,
te hablará su lengua,
que es la tuya.

Avanza sin miedo
mientras
sientes tus pasos
sobre la tierra.

Tú corazón
palpita de alegría
mientras el niño descalzo,
persigue tu mirada.

No te detengas
vence al miedo
de los miedos.

El niño bajo las estrellas
te llevará
al interior de la jaima.

miércoles, noviembre 06, 2019

El viento húmedo del mar_Ali Salem Iselmu


En las olas azules,
encontré restos
de la arena de mi infancia.

El mar me llevó
a la ciudad imaginaria
a los escombros del pasado.

Allí estaba mi casa
engullida por la arena
carcomida por el tiempo.

Más yo necesito volver,
tocarla por última vez
susurarle las palabras
que dejé entre sus paredes.

Cuando me despedí
aquella vez
con las lágrimas
del niño que corría
mirando las gaviotas,
mientras sus manos
tocaban el viento húmedo
del mar.

viernes, septiembre 06, 2019

Son girasoles_Ali Salem Iselmu


Ellos giran mirando el sol,
Abrazando el viento
buscando las lágrimas
de la madrugada.

Son girasoles
que aprendierpn
el himno de la luz
el ritual del sol.

Sus hojas anchas,
sus tallos finos
resisten los golpes del viento
y añoran los días de verano.

jueves, agosto 22, 2019

Tiris en el recuerdo_ Ali Salem Iselmu


En el recuerdo permanecen quietas,
las entrañas del Tiris,
su cielo vibrante de estrellas
sus dunas blancas
sus cumbres oscuras.

Del Tiris nació la arena
el agua transparente,
el viento que penetra en la tierra
y hace cantar a las montañas.

Los diablos y diablesas
son lagartos,
que hablan mirando la luna
en busca del calor del fuego.

lunes, junio 20, 2016

Una mañana en un cementerio (descanse en paz Mohamed Abdelaziz, presidente saharaui), de Ali Salem Iselmu


Hay un cementerio de piedras,
los nombres de sus difuntos,
aparecen esculpidos sobre la tierra,
un cementerio de kilómetros,
donde la vista se pierde
detrás de la aurora.

Niños, mujeres y hombres,
yacen enterrados,
debajo del fuego de las piedras,
el siroco entierra y desentierra,
la historia de cada uno.
Hay exilio en sus tumbas,
ellos ya no volvieron
otra tierra acoge sus cuerpos
en el interior de su seno.

Nadie hablará de ellos
son anónimos
como su hijos,
víctimas colaterales del destino,
solo existen en la memoria
del desierto y las arenas.

Y los que se acercan
a orar, cerca de sus tumbas,
se llevan un puñado de arena
para esparcirlo en el viaje del viento
en el viaje de la esperanza,
ellos son testigos mudos
de un mundo desvencijado,
un mundo derrotado
que no ha podido devolverles su tierra.


jueves, junio 18, 2015

El mundo de los ignorados_ Ali Salem Iselmu

Lo han matado,
como han matado a otros.

Lo quieren encerrar en el cementerio del olvido,
pasar página,
mirar hacia otro lado,
después de dejarlo sin vida.

los culpables pasean impunemente
mientras una madre expone su cuerpo
al hambre y al dolor.

Nadie se acercará a escuchar su clamor,
las cámaras miran hacia otro lado
y los medios de comunicación
envueltos en su desidia
ignoran el asesinato de Haidala,
ignoran la huelga de su madre.

No hay derechos humanos,
ni individuales,
ni políticos,
ni sociales.

Son saharauis,
los saharauis
no existen en la crónica de los sucesos
son parte de otro mundo
el mundo de los ignorados.


viernes, septiembre 20, 2013

Calendario interior_Ali Salem Iselmu

Ahora que mis versos
son inocentes,
mis palabras son mágicas.
y mis recuerdos son dolorosos.

No podré volver
al pequeño uad
en el que nací,
no podré escribir
la historia que sentí,
ni contemplar las montañas
de mi infancia.

Vuelvo resignado
a otro exilio
dentro de otro exilio.

La tumba de mi abuelo,
la tumba de mi hermano
se han quedado en otra tierra,
mientras otros hablan
bajo la sombra
del implacable tiempo.

Una generación
y otra
seguirán
mirando
un pasado, un presente y un futuro
que se confunden con la penumbra
de una tormenta de arena

que anuncia la próxima estación.  

sábado, junio 22, 2013

La ciudad robada_Ali Salem Iselmu

Un hombre
cruzó de día y de noche
una enorme ría
vio gigantes y monstruos
y escuchó extraños ruidos,
agotado en su pequeña barca
llegó a la orilla
en busca de un sorbo de agua.

Unos hombres extraños le expulsaron
y al volver su vista hacia sus ojos
vio su ciudad
encontró el sueño robado
y decidió quedarse.

Las calles ya no eran las mismas,
las casas cambiaron de color
y ya no entendía las palabras
y de repente aquel hombre
se sintió un intruso
en su propia ciudad.

Volvió a mirar
el océano
en busca de una respuesta
y en su barca encontró
el misterio de la ciudad robada,
del sueño usurpado.


Un hombre volvió a su tierra.

domingo, noviembre 22, 2009

Aminetu, la heroína de la libertad


Decidió sentarse en un limbo
exigir su libertad
romper las cadenas del muro
acabar con la hipocresía de los cobardes
invitar a los valientes
para que abran sus brazos.

Sus pequeñas manos
sus ojos diminutos
su cuerpo menudo
envuelto de esperanza y libertad.

Miró a las lágrimas del mar
y abrazó las dunas del Sáhara.

Ella volverá, llena de sueños
derrumbará la cadena de los verdugos
y gritará con la impotencia de su cuerpo:
dejar que el siroco abrace Lanzarote
dejar que vuelva a El Aaiun
el siroco no morirá de hambre
morirá en la cárcel de la ignominia
y el crimen perfecto.


Ali Salem Iselmu

jueves, septiembre 06, 2007

No es el final_Ali Salem Iselmu


(A mi hermano Bahia que creyó profundamente en la inocencia de sus pasos persiguiendo nuevos relatos bajo la luz de las estrellas y en medio de las dunas)


El no murió en medio de la ausencia
sus ojos negros, su sonrisa alegre
sus huellas en medio de las dunas
son su voz.

Dejó su imagen estampada
en el sonido de la noche
y con sus amigos transformó
las historias de las batallas.

Su vida ha sido una luz corta
tan solo vivió un instante
como una gota de agua
cuando se desliza y desaparece.

El no murió, hizo un pacto con la vida
y decidió no abandonarla nunca,
con sus lágrimas
con el eco de las montañas
y la ardiente tierra se quedó.

Impregnó su mente con una sonrisa infantil
y en medio de la arena y el viento
entregó su cuerpo inocente
a una nueva leyenda.

Y en su pequeña tumba
volverá a llover
y nacerán nuevas flores
y perseguirán el exilio
de su alma.

jueves, mayo 03, 2007

Reconciliación_Ali Salem Iselmu



Bajo la promesa del calor
desapareció la lluvia,
los colores son enigmáticos
y la nueva ciudad es una basta colina,
algunas palabras suenan lejanas
y el olor de la fruta es un espejismo.

La familia reunida alrededor del té
conversa de forma espontánea
y el horizonte desaparece en el cielo.
El turbante, el siroco,
la lógica del desierto
impone la naturaleza de las cosas.

El sabor de la leche es extraño
y cada paso persigue una nueva huella
en una ruta infinita;
ser beduino y caribeño
se lleva dentro del alma.

sábado, febrero 24, 2007

Cruces_Ali Salem Iselmu



Se cruzaron en nuestros pasos las caravanas de la muerte,
para marchitar el paso de las gaviotas,
partir el desierto en cientos de pedazos,
y detener el paso libre del viento.
Se cruzaron con la vida
para amontonar la arena
en los montículos de la muerte,
para negar
lo que el Sáhara nunca negó.
Se cruzaron con su fábrica
de cárcel torturas y odio.
Se cruzaron con el paso
fugaz y permanente de los nómadas,
para darse cuenta
que se habían cruzado
contra la historia que emana
de la tragedia que ellos hicieron suya.

miércoles, noviembre 01, 2006

Aaiun_Ali Salem Iselmu



El silencio se rompe
con el paso de la violencia,
la indiferencia se hace sombra
mientras la ciudad de los manantiales
se siente violada en su orgullo
violada en su rostro
violada en su cuerpo
cuanta violencia ciega;
la lápida de su imagen
se crece en medio de la sangre
y la tragedia es una voz
y la represión es cruel
y en el barrio Matalaá
orgullo saharaui,
el Aaiun es rebelde,
es soberana
es libre.

martes, septiembre 26, 2006

Intifada_Ali Salem Iselmu

Las tristes tinieblas arderán
en el nombre de la mitología de los hombres desnudos
con la virtud de la inocencia.

Ya no se apaciguará la lámpara encendida
que se transforma lentamente en una luz rebelde y sabia.
Iluminará el trayecto hasta el final.

Pero volverán a surgir los hombres vestidos con palabras
que el viento transforma en un enorme eco lleno de libertad.

Desaparecerá la represión de los que oprimen,
porque el llanto de la rabia será el grito de la alegría.


Del libro "Aaiun, gritando lo que se siente"

sábado, septiembre 02, 2006

La música del siroco_Ali Salem Iselmu



Cuando todo es invisible
y el turbante tapa los ojos,
los camellos se arrodillan
bajo las acacias.

Cuando el desierto,
es silencio y arena
y de la mar nace la tormenta
el sonido es oscuro
y tapa los ojos
y no puedes distinguir entre la noche y el día.

Cuando todo
es calor y sed
las venas de la tierra se secan,
bajo el manto de arena
veo surgir el fuego del alma.

sábado, agosto 05, 2006

Decirles_Ali Salem Iselmu



Decirles que la tierra no es de ellos.

Decirles que la gente no es de ellos.

Decirles que las piedras necesitan ser libres.

Decirles que el desierto solo conoce
a los nómadas dueños del sol y el viento.

Decirles que El Aaiún duerme
para quedarse sin sentido.

Decirles que quien niega
será negado por la ternura de esas voces melancólicas y sedientas.

Decirles que no hay más espera
que la espera del reencuentro renacido del polvo de la libertad.

Decirles con vuestra voz de fuego y amor
que somos el pueblo saharaui.


Del libro "Aaiun, gritando lo que se siente".
Generación de la Amistad saharaui

Translation_Ali Salem Iselmu



Poesía, poetry
Le dije yo en ingles
el no me entendió.

Le dije University of Leeds,
Bubisher, versos, fuego y esperanza;
el no me entendió.

Le dije poetry in spanish
translation in english.

Entendió mis versos,
Y me dijo:
Welcome to the United Kingdom.

Reflexión_Ali Salem Iselmu



El tiempo se impacienta de agonía y dolor
mientras las frías noches se conservan en cada
esquina.
La larga peregrinación penetra en el nuevo milenio.
Nuestras almas se alimentan lentamente de hermosas
visiones.
Quiero contener la calma sobre ese olvidado pecho
dibujar sus encantos para deshacerme de la desdicha
empujar con fuerza para alcanzarte y nunca volver los
ojos hacia atrás.
Vivir la evasión de los días en busca de la bondad de
los recuerdos
para contemplar mi arraigada memoria.
Pero no levantar las montañas para ver las infinitas
estrellas
si no recordar, porque en cada recuerdo
hay un sueño sobre el cual descansa mi alma.
Enlazar la fuerza para alcanzar la inseparable línea
del camino iniciático de la vida.
No ver más pastos hasta darme cuenta de cómo fue la
última lluvia
que quiso remediar la existencia de un desierto
convertido en una hermosa sabana.
Saber que la alegría es un remedio de cada instante,
es un escape y no una delegación de cada sonrisa
percibida después de una profunda lágrima.